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El conjunto dirigido por el argentino Ramón Díaz se impuso ante Brasil por 4 a 3 en la tanda de penaltis, luego de que el marcador en los 90 minutos reglamentarios haya sido de 1 a 1 con goles de Robinho y de Derlis Gonzales de penal, luego de una infantil mano dentro del área por parte de Thiago Silva, bastante similar a la que hizo frente al Chelsea por los octavos de final de la última Uefa Champions League.
A decir verdad, cuesta decir que fue un batacazo la derrota de Brasil. Es bien sabido que por la calidad de sus jugadores, pese a no contar con Neymar, su as de espadas, el seleccionado carioca siempre es uno de los candidatos a ganar el certamen. No obstante, teniendo en cuenta el rendimiento que venían teniendo uno y otro equipo, podíamos decir que ambos tenían un 50% de chances de quedarse con el pasaje a semis. Y así quedó plasmado en el terreno de juego. Es cierto que fue Brasil quien pegó primero con el gol de Robinho a los 15 minutos de la primera etapa, luego de una gran jugada colectiva que culminó con el centro de Dani Alves para que el ex delantero del Real Madrid y Manchester City, entre otros empujara el balón hacia la red. Pese a ello, el combinado guaraní, que no había sido menos que su rival hasta el gol, siguió intentando y, para gran sorpresa de todos, fue quien mantuvo la posesión del esférico, mientras que Brasil fue quien se paró de contraataque.
Sin embargo, el poco poder ofensivo de Paraguay se hizo evidente como en otros partidos de la Copa y no pudo crear situaciones muy claras para empatar. Pero era remarcable que los de Dunga no podían (o no querían) agarrar la pelota.
En la segunda mitad la cosa no varió. Los dirigidos por Díaz siguieron con su estrategia y a los 27 minutos tuvieron su premio. Inocente mano dentro del área del defensa del PSG, Thiago Silva y penal para Paraguay. Quien se hizo cargo del mismo fue Derlis Gonzales, delantero del F.C Basel de Suiza. Derechazo cruzado que hizo estéril la estirada del guardameta Jeferson y se ajusticiaba el resultado. Brasil sintió el golpe y tuvo que sufrir para no perderlo en el tiempo reglamentario.
Llegó el pitazo final y todo debió definirse por tiros desde los doce pasos. Al igual que la Copa América del 2011, Brasil erró más de lo que metió y Paraguay consiguió el pasaje a la próxima instancia.
De esta forma, quedaron definidos los dos cruces de semifinales: Chile, el anfitrión de la competición, se enfrentará al Perú de Paolo Guerrero el lunes 29 de junio y Argentina, para muchos la gran favorita para quedarse con el título después de 22 años, hará lo propio ante el conjunto paraguayo un día después.
A continuación, el resumen del partido y la tanda de penales:
Escrito por: @rodriisvarz10
