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El Real Madrid se llevaba el primer clásico de la presente temporada con una victoria merecida frente al eterno rival a pesar de comenzar el encuentro por detrás en el marcador.
Comenzaba el partido y sin prácticamente dar tiempo a acomodarse en el asiento marcaba el Barcelona por medio de Neymar, que dribló a los defensas del Madrid y se abrió paso hasta tener posibilidad de disparo frente a Casillas, al que batió con un tiro raso pegado al poste. Veían los blancos como, una vez más, el equipo blaugrana no se iba a marchar del Santiago Bernabéu sin dejar la portería blanca sin perforar.
Tras el tanto del brasileño, los merengues empezaron a llevar el control del partido, y con el control llegaron las ocasiones que fueron de todos los colores. Benzema estuvo presente en casi todas ellas, como rematador o como pasador, cuajando uno de sus mejores partidos de la temporada. La más clara del ex del Lyon llegó en un testarazo a un centro de Cristiano Ronaldo que terminó pegando en el travesaño, y el posterior rebote lo remató alto el galo.
Los visitantes pasaron unos minutos bastante metidos en su área sin poder salir debido a la presión tras pérdida que hacían los blancos en esos momentos, pero al ver que no llegaba el ansiado tanto, los locales tuvieron unos minutos de bajón, algo que intentó aprovechar el rival. Y estuvo a punto de hacerlo Messi, que tuvo un remate frente a Iker que el de Móstoles pudo sacar a córner milagrosamente.
Cosas del fútbol, en el peor momento del Madrid iba a cometer un penalti inexplicable Piqué por mano, que se lanzó al suelo para tapar un centro de Marcelo y dejó la mano atrás y cortó claramente la trayectoria del balón. No iba a fallar la pena máxima Cristiano y ponía las tablas en el marcador. Iba a tener una más el equipo de la capital para ponerse por delante con un testarazo de James que remata fuera estando solo en el área pequeña.
La segunda mitad iba a comenzar con una contra de los madridistas que el astro portugués finalizaba con un disparo que acababa despejando a córner un defensa culé. Justamente en ese saque de esquina iba a llegar el gol de Pepe, que remataba solo y sin oposición y daba la vuelta al marcador el equipo local. La réplica visitante iba a llegar con un soberbio disparo desde la frontal de Mathieu y una no menos buena intervención de Casillas.
El tercero del Madrid iba a llegar tras un córner mal ejecutado por Rakitic, y la insistencia de Isco iba a hacer el resto. Ante la pasividad de Iniesta y Mathieu iba a colarse entre ellos para robarles la cartera e irse flechado hacia la portería, le entregaba el balón a Cristiano que a su vez se la daba a James, que retuvo poco la pelota al ver el desmarque de Benzema que no iba a perdonar frente a Bravo y rubricaba su buen partido con un tanto.
En estos momentos se rompió el partido, con ocasiones en ambas áreas, las más claras una de Neymar que cabecea alto un centro y otra de Benzema que dispara arriba. El Madrid iba a tener el control del partido hasta el final y se llevaba los tres puntos y la moral reforzada de un encuentro ante el eterno rival.
Escrito por: @Jorge_MV_
