7 de diciembre de 2014

Luego del aparatoso golpe recibido, que felizmente no pasó a mayores en el partido ante el Cornellá por la Copa del Rey y ser baja ante el Celta, Khedira sigue sin entrenarse con sus compañeros. La suerte no le es favorable al alemán. 

Atrás quedaron los buenos momentos de juego colectivo e individual realizado en la Copa del Mundo donde brilló con su selección. Salvo el incidente ocurrido en Copa del Rey, Sami no ha encontrado un lugar en el once titular de Ancelotti y no parece encontrar brújula para lo que serán sus próximos meses en el equipo blanco. Si hace unos meses se indicaba a viva voz que las intenciones del alemán eran de quedarse en el Real Madrid para de esta manera encontrar su mejor nivel, esta semana que pasó abre el paso a la polémica citando a un Khedira poco seguro de su estado contractual en los próximos meses. Se ha especulado mucho sobre su posible destino, principalmente Arsenal hasta el momento, pero hasta que no se haga público un comunicado oficial, solo nos queda tratar de desear que Khedira, al igual que lo hizo Isco en su momento, cambiara su manera de juego para adaptarse a las ideas tácticas de Ancelotti. 

Analicemos por un momento a Sami. 
Un jugador todo terreno que aporta al Madrid su gran estado físico en el ida y vuelta, que si bien no posee una gran técnica como su compatriota Kroos, Khedira si tiene llegada al área rival generando mayor peso ofensivo al equipo dirigido por Carletto. Su punto negativo son las lesiones. En la temporada 2010/2011 sufrió una lesión en la final de Copa ante el Barcelona y la más reciente fue que sufrió en la rodilla luego de un choque con Pirlo en un amistoso contra Italia allá por noviembre del año pasado. Ambas de consideración, pero de las cuales felizmente ha podido salir victorioso. Khedira no es un muchacho jóven y eso dentro del ambiente futbolístico pesa mucho. A sus 27 años parece verse opacado en el equipo blanco ante tanto talento en la plantilla. No podemos ver su mejor momento en el equipo desde hace mucho tiempo. Es otro el escenario con su selección, con la cual cuenta con más confianza en el trato del balón y es pieza fundamental en el equipo. 

Su duro trabajo ha extendido su palmarés de manera considerable, pero esto queda al margen cuando se observa el desempeño del alemán de manera individual. Si bien el esquema táctico de Ancelotti responde a contar con mucho más soporte en el medio sector de la cancha, también demanda un gran capacidad técnica y velocidad en ataque, características que no son propias de Sami a pesar de trabajar diariamente en los entrenamientos con sus compañeros. Esperamos que en las próximas semanas -debido a la cargada agenda competitiva del Real Madrid- tenga más oportunidades para demostrar su talento y ya no sea tan solo una pieza de recambio y/o rotación dentro del equipo, sino, un elemento a tener en cuenta para el once inicial. 

Escrito por: @PedroAlmora

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