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Italia logró salvar un valioso empate en Bulgaria gracias a un gol del debutante Eder, que consiguió en los minutos finales poner las tablas en el marcador y no complicar tanto la clasificación para los italianos.
Comenzaba el partido de la mejor forma para los visitantes, con un autogol de Minev al rebotarle un despeje del guardameta Mihaylov que ponía el 0 a 1 y hacía pensar que iba a ser un partido plácido para los pupilos de Conte, a pesar de las bajas por lesión de Pirlo y Marchisio y por fiebre de Buffon.
Pero no iba a ser así. Comandados por el nuevo seleccionador, Ivaylo Petev que sustituía a un viejo conocido de la liga española, Lubo Penev; los locales lograron la igualada en un disparo lejano de Popov ante el que Sirigu se estiró pero no consiguió deterner el potente y raso disparo del jugador del Kuban Krasnodar.
Pero no se iba a quedar ahí la reacción de los locales, sino que iban a ponerse por delante y la jugada iba a tener una vez más como protagonista a Popov, que puso un centro para que Micanski rematara de cabeza y pusiera el 2 a 1y daba la sorpresa en Sofía.
Ambos tantos llegaron motivados por la pasividad de la defensa italiana, que demostró una fragilidad y debilidad preocupantes que posiblemente ante un rival de más entidad les hubiese salido más cara.
Iban a tener la oportunidad hasta de poner más tierra de por medio los búlgaros por medio de, como no, Popov que estrelló una falta en el larguero y terminó de meter el miedo en el cuerpo a los italianos si es que todavía no lo tenían.
En la segunda mitad Conte iba a meter toda la carne en el asador, iban a entrar en el campo Soriano, Gabbiadini y Eder y se iban a marchar Bertolacci, Zaza y Antonelli.
Con la polémica surgida estos últimos días en Italia con respecto a los extranjeros nacionalizados y si debían o no jugar con la Azzurra, uno de esos nacionalizados iba a salvar el partido.
Eder, brasileño nacionalizado italiano, iba a demostrar que si Conte le llamó fue por algo y demostrando su buen momento iba a soltar un latigazo a la media vuelta desde la coronilla del área que no iba a poder detener el arquero búlgaro y conseguía un empate que sabe a oro para los transalpinos.
De esta forma los italianos mantienen la segunda posición y se colocan a dos puntos de Croacia, que será su próximo rival en junio.
Escrito por: Jorge_MV_
