29 de octubre de 2014

Partido luchado y ganado sobre la hora con muchos amonestados e incidencias que pasaremos a tratar a continuación. Partido no apto para cardíacos. 

Ambos equipos se caracterizaron desde un primer momento de contar con un sistema táctico específico para el partido del día de hoy.

LIVERPOOL (4-5-1): 
GK: Jones
DEF: Johnson, Touré, Lovren, Manquillo 
MID: Coutinho, Henderson, Leiva, Borini, Markovic
FWD: Lambert

Suplentes:
Moreno, Lallana, Mignolet, Can, Skrtel, Balotelli, Rossiter

SWANSEA (4-4-2):
GK: Tremmel
DEF: Taylor, Williams, Rangel, Fernandez
MID: Shelvey, Dyer, Montero, Fulton
FWD: Emmes, Gomis

Suplentes: 
Fabianski, Bony, Carroll, Routledge, Bartley, Shephard, Barrow

Luego de las recientes fechas Champions y Premier, Brendan Rodgers tuvo la inminente tarea de enfocar mucho más el trabajo en definición y constancia de ataque del equipo. Con la baja ya confirmada de Mamadou Sakho debido a una lesión en el muslo durante los entrenamientos, "los reds" no tenían otra consigna más la de ganar. 

"The reds" avisaron desde el inicio del partido con dos remates por parte de Henderson y Lucas Leiva antes de los primeros 10min. El partido prometía la mejor versión de este nuevo Liverpool, ahora quizás contando en banca a Balotelli. Quizás era la solución. 



Acto seguido Enmes ganó un tiro libre a favor del Swansea, pero sin llevar mayores inconvenientes a la porteria de Jones. Cerca a los 15min, Coutinho insistía con remate de derecha desde fuera del área, pero el balón se va desviado por poco. Llegaba el minuto 20 y dos córners consecutivos daban al Liverpool esa presencia en el área contraria que tanto necesitaban, aún sin concretar resultados.


"Los Reds" supieron ganar jugadas en campo contrario tras el inicial remate de cabeza de Lambert a los 22min, seguido por una falta ganada en el medio campo por parte de Fabio Borini, no dejando de lado un tiro libre en ataque por parte de Johnson. Las acciones no pararían ahí para "los reds" los cuales insistían mediante remate de pierna derecha por parte de Coutinho y un remate de izquierda por fuera del área por parte de Markovic decían claramente las intenciones del equipo dirigido por Brendan Rodgers.

Iba llegando el minuto 35' del partido y Fabio Borini daba su mejor versión de juego tras dos remates de izquierdas que por poco lograron llenar de júbilo las gradas de Anfield. Fuera de los tiros libres por parte de Fernandez y Taylor, el equipo rival parecía no tenerlas consigo ante un Liverpool que quería más.


En el minuto 41' Lucas Leiva volvía a dar lucha con un remate de derecha que no llega a concretar haciendo un disparo muy alto. La respuesta del Swansea no se hizo esperar, siendo Dyer el responsable de un tiro de derecha que no fue mayor problema para el experimentado Brad Jones. Llegaba casi a su fin el primer tiempo del partido no sin antes dejar marca Jonjo Shelvey pero sin concretar favorablemente para los intereses del Swansea.


Empezaba el segundo tiempo con el marcador a cero con un sinsabor que era palpable en las gradas de Anfield y Federico Fernández ganaba un tiro libre por la banda izquierda seguido por una recuperación de balón por parte de Coutinho. Llegaba el minuto 51' y Jay Fulton se ganaba la primera tarjeta amarilla del partido. 


Coutinho no paraba de inistir a portería contraria con un remate de derecha desde la parte izquierda del área, el cual es atajado a la mitad de la portería por parte de Tremmel. No hubieron mayores incidencias hasta el minuto 61' cuando Gomis intentaba batir la portería de Jones con un remate de cabeza al centro del área. Coutinho siguió insistiendo en el minuto 62' más a base de ganas que de eficacia pero lamentablemente sin concretar resultados. En el minuto 63' Taylor se ganaba la cartulina amarilla, segunda para el Swansea. 

Casi de manera inesperada, y quizás para algunos inmerecida, apareció Marvin Emnes para aperturar el marcador con un remate cruzado desde la parte izquierda del área para colarse por la parte baja del ángulo derecho de la porteria de Jones. El fútbol muchas veces no es justo, señores. Es así. Y de esta manera el Swansea se ponía adelante en el marcador en el minuto 65' del partido. Emnes se llenó de fe y buscó su segunda anotación en el minuto 68' con remate de zurda al centro del área, pero sin resultar favorable para los intereses del Swansea. 

Caras largas se divisaban en Anfield vaticinando, sino, un resultado nuevamente adverso. Brendan Rodgers movió la banca de suplentes ingresando Adam Lallana por Lazar Markovic de regular actuación. Lambert se hacía presente en el minuto 74 con un remate de derecha desde fuera del área, pero era fácilmente controlado por el portero Tremmel. En el minuto 75' Coutinho nuevamente avisaba más sin poder equiparar el marcador para "los reds". Se disipaba el tiempo y llegabamos al minuto 80' con una variante si bien arriesgada, era meritoria. A todo o nada. Ingresa Balotelli por Rickie Lambert. 


Se iba terminando el segundo tiempo, sin aparentes cambios en el actuar de los protagonistas, pero así como dicen los grandes del fútbol: "Un buen delantero hace goles cuando más se le necesita", llegaba un remate de izquierda por parte de Balotelli desde el centro del área hacia el lado derecho de la portería de Tremmel. Nada que hacer por parte del guardameta del Swansea. ¡Gol para el Liverpool! La gente de pie en el estadio.



Llegaba el minuto 90' y el colegiado indicaba 7 minutos que serían eternos para los intereses del Swansea ya con el Liverpool encimado queriendo bajo cualquier circunstancia el dar vuelta al marcador. Balotelli avisaba nuevamente en el minuto 91' pero manda el balón muy por encima del travesaño desperdiciando una muy buena ocasión de gol. Llegaba el minuto 92 y tras una fuerte falta Federico Fernandez el árbitro le muestra la tarjeta roja. 


El Swansea se quedaría con uno menos para lo que restaba del encuentro. Al minuto 93' "Super Mario" intentaría nuevamente vía tiro libre, pero el balón sale desviado. Angustia en Anfield. Era así como tras intentar una y otra vez llega Dejan Lovren el cual encaja un cabezazo desde el centro del área al lado derecho del portero Tremmel. El arquero del Swansea no podía creer su mala suerte. ¡Gol para el Liverpool! El estadio enloqueció. No hubo tiempo para más. El partido se daba por concluído en el minuto 97'. Liverpool hizo la hazaña. 



Con unos contundentes 20 disparos a puerta por parte del Liverpool, se dio a conocer un mensaje muy claro: el equipo nunca bajó los brazos. ¿Acaso esa mística que caracterizó al equipo que en su momento ganó cinco Champions League se mantiene latente y el marcador del día de hoy fue sólo un indicio del esperado despertar? Eso sólo lo sabremos viviendo cada jornada y esperando que aquel equipo avasallador siga luchando hasta el último balón y demuestre la calidad que lo hizo grande. 

Escrito por @PedroAlmora

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