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Empieza un nuevo año con mucha ambición para los blancos ante un complicado Valencia el 04/enero en Mestalla. Para algunos, la programación del partido amistoso ante el A.C. Milan fue completamente innecesario debido a que, a pesar del premio por aceptar la invitación, el riesgo de contar con jugadores lesionados fue muy grande a puertas de iniciar la etapa más dura en las competiciones venideras.
Ancelotti ha probado una y mil veces ser el entrenador que en estos momentos necesita el Real Madrid, no solo por los objetivos inmediatos alcanzados, pero también por traer calma al vestuario y ante la prensa. Ancelotti cuenta con una personalidad muy diferente a la de Mourinho, y cabe destacar, que tras la mala experiencia vivida con el portugués, era muy fácil suponer que el siguiente entrenador a recibir el buzo del Real Madrid seria mejor tratado por una prensa española y mundial dolida por lo ocurrido con Mourinho.
Fuera de seguir con comparaciones y viendo hacia lo que viene para el Madrid, se llegó a conseguir la 10ma Champions League, Super Copa de Europa, Copa del Rey y el más reciente Mundial de Clubes, pero si se desea extender aún más la historia del club es necesario pasar de página y pensar en que si bien este último año, los procesos impuestos por Carlo funcionaron, no olvidemos que Ancelotti recibió un equipo semi-armado por parte de Mourinho, que para bien o para mal, sirvió de base para conseguir los títulos obtenidos. Es cierto, vinieron jugadores con gran capacidad de ataque y con gran calidad para el juego individual y colectivo, pero sin un correcto planteamiento táctico, todo hubiera sido una inversión tirada al agua.
Ancelotti tuvo la certeza de saber dosificar el gran esfuerzo físico debido al poco tiempo de recuperación entre competición y competición, de dar minutos a quienes pensaban que con tantas nuevas estrellas en el equipo titular no tendrían siquiera una oportunidad de juego. Se rescata lo logrado con Álvaro Medran formado en el club, quien supo corresponder a las circunstancias y exigencias impuestas por el ajustado calendario competitivo. Lo inmediatamente preocupante es la recuperación de Sergio Ramos de la lesión que lo aqueja -y que inclusive arriesgó aún más al jugar el Mundial de Clubes lesionado- la reincorporación de Modric en el centro del campo y la vuelta al 100% de Jesé.
Material sobre el que trabajar y variantes técnicas y tácticas hay de sobra. Manejo de egos, también lo hay. Lo que se le exige ahora al mejor equipo de Europa es no solo mantener el nivel, sino plantear diferentes alternativas para ganar, gustar y golear en cada competición en la que participe.
Se abre un mercado de inviero lleno de especulaciones y rumores para reforzar la delantera madridista así como otros sectores puntuales del campo, pero lo que de lejos necesita un recambio es la defensa y la portería. En defensa no solo por el factor edad de Ramos y Pepe juega un rol fundamental, sino que Marcelo suele ser muy irregular por izquierda al igual o en mayor medida que Coentrao. Por derecha Arbeloa ya no tiene el mismo ritmo que en sus mejores años y si bien Carvajal ha dado muy buenos resultados cuando más se le necesitó, aún es muy voluble a ganarse amarillas al igual que Ramos. Esta acumulación de tarjetas es sin duda, lo que afectó directamente los planteamientos defensivos por parte de Ancelotti, pero siempre respondió Nacho con seguridad y firmeza como pieza de recambio. Si bien la solidez defensiva -y ataque feroz por parte de Ramos- ha sido un factor decisivo en cada victoria alcanzada, se debe pensar inmediatamente en la idea de contar con Varane como defensor principal a llevar la batuta de recambio generacional en la defensa.
Si hablamos de la portería actual del Real Madrid, es un tema completo para debate abierto y debe ser analizado con pinzas a fin de no herir egos. Con el fin de ser objetivos, y no señalar ningún aspecto extradeportivo por parte de nuestros arqueros, calificaremos a Casillas como un portero con rendimiento en declive debido al factor edad y a Keylor como un portero más reactivo regalando botes en lugar de embolsar el balón. Si bien, Iker ha ganado multiples títulos a nivel personal y a nivel colectivo hay que tener siempre presente que la carrera de un jugador de fútbol no es eterna y, haciendo de un lado la prensa, si Casillas quiere retirarse por la puerta grande del club debe mostrarnos el por qué se le catalogó en su mejor momento el mejor arquero del mundo. Por el otro lado de la moneda, Keylor llega con el cartel de ser el "reemplazo" de Iker de a pocos a fin de que en una futura temporada no sea extraño encontrar al costarricense complementando lo realizado en el mundial de Brasil con la escuela de Casillas. Casi al margen de la trayectoria de los previamente mencionados arqueros, nos sonríe Pacheco, un muchacho al cual no le pudo tocar una mejor generación de jugadores de los cuales aprender valores, ritmo competitivo y cabeza fría al momento de defender el escudo del Real Madrid. Se espera ver con mucha más frecuencia a Pacheco no solo para contar a un tercer portero hábil ante cualquier inconveniente, sino pensando de cara al futuro como una pieza clave a considerar.
Se espera un nuevo año con muchas novedades y sorpresas, fichajes, cesiones, cambios tácticos, errores, títulos, más errores y felicidad. Esa felicidad que solo el Real Madrid sabe darnos.
Escrito por: @PedroAlmora
