12 de diciembre de 2014

 
Llegaba el Inter a Azerbaiyán con la clasificación y el liderato del Grupo F de la UEFA Europa League asegurados. Los de Roberto Mancini, con más suficiencia que fútbol, no se jugaban nada en un Estadio Tofik Bakhramov dispuesto a lograr la gesta. Si su modesto Qarabag lograba la victoria, se colaría entre los 32 mejores clubes de la segunda competición más importante de Europa. Los nervios y el ímpetu del humilde conjunto azerbaiyano, unido a la pasividad de unos italianos deprimentes sin sus futbolistas clave como Kuzmanovic, Kovacic o Icardi, dejó en la retina del espectador un encuentro infame e indigno de recordar.
 
Porque hay veces en los que el arte del fútbol se convierte en un suplicio para el hincha. Y este Inter invita a dar esa sensación. Deambulando por la Serie A, los neroazzurri mostraron la misma apatía en el último encuentro de la fase de grupos de la Europa League. La pelota era italiana, pero las ocasiones brillaban por su ausencia. Al Qarabag, sin embargo, le sobraba todo aquello de lo que el Inter carecía, mientras añoraba ese salto de calidad que, a pesar del bajón en los últimos años, los transalpinos poseían con respecto a su rival.
 
A pesar del empeño de los locales, el Inter era dueño y señor del balón por pura lógica. Pero los de Mancini se sentían estériles, inoperantes. Ni los balones colgados por Obi ni los intentos de Campagnaro de segunda línea conseguían inquietar a Sehic. El Qarabag, sin embargo, tuvo que esperar a la jugada final del partido para recibir su merecido premio a la fe y a no desistir jamás. Fue en el 94', cuando Richard desviaba en el área chica un disparo de un compañero para que terminara colándose en la portería de Carrizo. El delirio llegó a Azerbaiyán, hasta que el línea decidió hacer añicos un sueño que por unos instantes fue realidad. Y que, como demuestran las imágenes, debió serlo. Un error que no empañó el esfuerzo titánico del humilde Qarabag, que dejó su gesta en un empata a nada de un Inter sin fútbol.
 
 
Redactado por David Gómez (@DavidGmez99)

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