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Comenzaba el encuentro en un Estadio de Vallecas con muy poquitos espectadores. El encuentro prometía un bonito duelo entre dos equipos de primera. Ambos conjuntos sólo se habían visto las caras en esta competición en tres eliminatorias en la década de los 90 y en las tres el Valencia había conseguido el pase a la siguiente ronda.
El Rayo Vallecano, en los primeros compases del encuentro, ofreció una intensa presión en todo el terreno de juego sobre los valencianistas. A los de Nuno les costó entrar en el juego en los primeros 20 minutos del partido, mandando muchos balones en largo a sus hombres de arriba sin ninguna precisión. Ambos porteros fueron espectadores de lujo durante la primera media hora de juego ya que ninguno de ambos conjuntos llegaba al área contraria ni disparaba sobre la portería rival. El Rayo intentó llevar el peso del partido durante toda la primera parte ante un tímido Valencia con mucha imprecisión y sin que aparecieran sus hombres creativos en el centro del campo.
La primera tarjeta del partido fue para el jugador rayista Pozuelo por un claro agarrón sobre Piatti que imposibilitaba la contra del equipo ché. En la siguiente jugada del encuentro, pudo haber penalti del defensa valencianista Lucas Orban sobre Licá pero el árbitro no vi nada en la acción (minuto 27). Durante toda la primera parte uno de los duelos más bonitos lo protagonizo Manucho con los centrales valencianistas Otamendi y Mustafi. En el minuto 38 de juego, un saque de esquina botado por Jozabeb rebota en Orban, que deja muerta la pelota en el área chica, lo aprovecha Álex Moreno que bate a Yoel con un disparo raso a la derecha del meta.
En la última jugada de la primera mitad, Ze Castro se marchó lesionado y en su lugar entraría Amaya. La primera parte no dio para más. Los rayistas se mostraron muy seguros en defensa ante un desaparecido Valencia en labores ofensivas.
La segunda la parte comenzaría igual que acabó la primera mitad, con una intensa presión del Rayo sobre el Valencia que ahogaba la salida del balón de los ché. Hasta el minuto 25 de juego de la segunda parte no reaccionaría el Valencia. Error garrafal del meta Cobeño que le da el balón a Álcacer y este hace la igualada. Tras el gol valencianista, entraría al campo André Gomes para crear juego en la medular. Otro error en la salida del balón de los de Jémez proporcionaría a Piatti llevarse el balón y dar un estupendo pase a Rodrigo de Paul que fusilaría a Cobeño con un disparo cruzado que poco pudo hacer el meta.
El partido finalizaba con 1-2 a favor del Valencia en un encuentro con poco fútbol y sin juego creativo en la medular del Valencia sin ninguna ocasión de gol en toda la primera parte.
En mi opinión, el empate hubiera sido lo más justo porque el Valencia, hasta el gravísimo error de Cobeño en el primer gol, no había ofrecido apenas ocasiones de gol, no estaba jugando a nada y estaba desaparecido en el centro del campo. Demasiado premio la para los valencianistas y veremos que sucede en la vuelta en Mestalla.
Redactado por: @pericoo18
