31 de octubre de 2014

No queremos olvidarnos de la generación que nos hizo campeona del mundo. Era junio de 2010 cuando nos preparábamos para un mundial que pasaría a la historia. La selección española llegaba tras haber conquistado su segunda Eurocopa hacía dos años.

El 11 de junio comenzaba un mundial de justamente un mes, ya que la final en Johannesburgo se disputaba el 11 de julio. La selección de Vicente del Bosque fue una de las últimas en llegar al país africano.

El primer partido de la roja se jugó a las 16:00 en horario español. Ese partido fue el único que jugamos a esa hora, y que malos recuerdos nos trae. Ese partido lo perdimos 1-0 debido a una jugada desafortunada dónde Gerard Piqué se rompió la ceja. Malas caras en los jugadores españoles, parecía que el sueño se iba cada vez diluyendo más y más.

En el segundo partido jugamos frente a Honduras. Si ganábamos seguíamos teniendo opciones de clasificarnos, si perdíamos nos tocaba hacer las maletas e irnos para casa. David Villa anotó el primer gol del partido en un bonito disparo cuando se estaba cayendo al suelo. El segundo gol lo anotó Andrés Iniesta con un disparo raso a la derecha del guardameta hondureño. Un 2-0 que nos hacía soñar con la posibilidad de clasificarnos para octavos de final.

En el tercer partido del grupo nos enfrentabamos a Chile. Si ganábamos éramos primeros de grupos, y así fue, nos clasificamos ambas selecciones, pero España fue primera de grupo. El primer gol llegó tras una contra de Torres dónde Bravo salió hasta el borde de la banda, David Villa anotó desde lejos para poner en ventaja a España. El segundo gol fue también obra del delantero asturiano, dónde puso el 2-0. Al comienzo de la segunda mitad, Chile recortó distancias con un disparo lejano.

En octavos de final nos tocó la Portugal de Cristiano Ronaldo. Aquel partido fue el comienzo de unas eliminatorias que eran ganar o irse para casa. En una buena jugada de la selección, Xavi Hernández mandó un pase de tacón a David Villa que el guaje anotó tras un primer rechace del guardameta portugués. Cristiano Ronaldo había sido derrotado, y ahora tocaba una dura Paraguay en cuartos de final.

Tocaba Paraguay en uno de los partidos dónde España vio más difícil la victoria. En este partido hubo dos penaltis. Primero Xabi Alonso anotó un penalti invalidado por el colegiado. En el segundo lanzamiento del tolosarra, el balón no entró en la portería. Después Paraguay pudo anotar gracias a un penalti provocado por Gerard Piqué. Apareció el santo para parar aquel fatídico penalti. La clasificación nos la volvió a dar el máximo goleador de la selección en un disparo que tocó dos veces en el poste antes de entrar en la portería.

En semifinales tocaba la temida Alemania que llegaba de golear a Argentina. En aquella ocasión, el salvador fue el tiburón Puyol. En un lanzamiento de esquina parecido al que ya realizaron Xavi y Puyol en el famoso 2-6 al Real Madrid, el defensa remató un cabezazo increíble para meter por primera vez en la historia a la selección española en una final de un mundial.

11 de julio de 2010. Esperaba en la gran final la selección de Holanda. Aquel partido nos dejó momentos que han pasado a la historia del fútbol español. Lo primero fue una patada en el pecho que le dio De Jong a Xabi Alonso y que el colegiado Howard Webbs sólo mostró tarjeta amarilla. Otra ocasión histórica fue un mano a mano entre Iker Casillas y Arjen Robben que el guardameta madrileño le sacó cuando ya estaba batido con su pie izquierdo. Empate a 0 al final de los 90 minutos y nos tocaba jugar una prórroga y una posible tanda de penaltis si todo hubiera terminado empate.

La jugada del gol español llegó en una recuperación de la defensa hispana. Jesús Navas comenzó a recorrer la banda hasta pasársela a Fábregas, Fábregas a Xavi y Xavi a Torres. Desde la banda, Fernando Torres centró el balón, Van Der Vaart rechazó aquel centro, pero el balón llegó a Fábregas que de primera se la pasó a Iniesta. Ya mano a mano, Iniesta batió al guardameta holandés en aquel minuto 116. Aquel momento sellaba la historia del primer mundial en la historia del fútbol español.

Aquel momento nunca lo olvidaremos, y ya llegará algún mundial más, pero ninguno podrá ser nunca como el primer mundial que vimos a España levantarlo. Esta generación no se volverá a repetir nunca y por eso siempre estaremos agradecidos a los 23 jugadores que nos hicieron saltar de alegría en aquella noche de verano.

Escrito por: @laquiniela_es

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