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Era uno de los jugadores más solicitados de Europa, y al final terminará vistiendo de neroazzurri. Durante el día de ayer, Xherdan Shaqiri hizo oficial su marcha del Bayern de Munich al Inter de Milán. El talentoso extremo suizo, que llegó a la capital bávara en verano de 2012 desde Basilea con la vitola de ser uno de los futbolistas con más futuro de Europa, apenas contaba en los planes de Pep Guardiola, por lo que hace tiempo que se veía obligado a buscar una salida. Muchos clubes han pretendido la incorporación del jugador helvético, desde el Arsenal y el Manchester United en la Premier League hasta el Atlético de Madrid en España. Finalmente, la entidad lombarda ha conseguido moverse con rapidez y ejecutar una operación tan exitosa como necesaria.
Shaqiri, quien apenas ha gozado de minutos en esta campaña, llega cedido a Milán hasta el final de temporada, con una opción de compra obligatoria de 18 millones de € al final de la campaña. Así pues, el suizo aterriza en Milán con 71 partidos jugados en el Bayern, 19 goles anotados y un palmarés envidiable de 2 Bundesligas, 2 DFB Pokal, 1 DFL-Supercup, 1 UEFA Champions League, 1 Supercopa de Europa de la UEFA y 1 Copa Mundial de Clubes de la FIFA. Muchos logros que Shaqiri espera incrementar bajo las órdenes de Roberto Mancini, siendo el segundo fichaje invernal del Inter tras la incorporación del veterano futbolista alemán Lukas Podolski. Así pues, el propietario y presidente de la entidad, el indonesio Erick Thohir, ha conseguido satisfacer las peticiones de su técnico, quien solicitaba con urgencia la contratación de futbolistas en la parcela ofensiva, donde solo el argentino Mauro Icardi ha ofrecido el rendimiento esperado en esta primera parte de la temporada.
Por David Gómez (@DavidGmez99)
