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Quizás las situaciones hayan cambiado. El Barcelona de Luis Enrique vuelve a viajar al Allianz Arena para enfrentarse al Bayern de Múnich en unas semifinales de la UEFA Champions League. Y aunque la eliminatoria parece bastante encarrilada con el 3-0 de la ida, el equipo dirigido por Pep Guardiola intentará plantear un partido muy similar al que se pudo ver en último enfrentamientos entre ambos equipos en tierras alemanas.
En la memoria de muchos todavía está aquel 23 de abril de 2013. Dos años más tarde, todavía se recuerda aquel correctivo del equipo bávaro (por aquel entonces dirigido por Jupp Heynckes) al Barça de Tito Vilanova. En el partido, que Leo Messi vería desde el banquillo por su lesión en el bíceps femoral, y el argentino vería como Mario Gómez en dos ocasiones, Thomas Müller y Arjen Robben completarían una goleada histórica (4-0) que dinamitaría todas las opciones del cuadro blaugrana en la competición.
Cabe decir que de aquel partido, la gran mayoría de los jugadores bávaros de esta temporada no estaban en las filas del Bayern. De hecho, seis de los once titulares de la famosa goleada (Van Buyten, Javi Martínez, Arjen Robben, Frank Ribery, David Alaba y Mario Mandzukic) no jugarán este partido, y por parte del Barça sí lo hará un Leo Messi del que Franz Beckenbauer advirtió que "sin él, el Barcelona sería un equipo ordinario". Unas declaraciones que no han sentado bien en Can Barça y que intentarán demostrar que el mítico jugador alemán se equivoca. Una buena prueba de ello ha sido la convocatoria de Luis Enrique, que se ha llevado a Múnich a todos los jugadores disponibles, incluso a varios jugadores del filial (Samper, Munir y Sandro).
Por: @NehemiasDorta
