“Allá
donde vaya, seguiré gritando Hala Madrid”. Estas palabras las pronunció un
emocionado Iker Casillas en su despedida de la que ha sido su casa desde hace
25 años. Más de 720 partidos defendiendo la camiseta del Real Madrid,
convirtiéndose en el guardameta con más partidos del equipo blanco, y el
segundo jugador detrás de Raúl.
5
Ligas, 2 Copas del Rey, 4 Supercopas de España, 3 UEFA Champions League, 2
Supercopas de Europa, 2 Intercontinentales y 1 Mundialito, constituyen el
palmarés de 15 años defendiendo la camiseta, con 18 títulos a sus espaldas, y
una vida entera como madridista.
En esa
primera temporada de 1999/2000, Iker abrió el milenio siendo el portero más
joven en jugar y ganar una Final de la Copa de Europa, cuatro días después de
cumplir los 19 años, recibiendo el Trofeo Bravo al mejor futbolista joven de
Europa.
Él
mismo viviría la Era Galáctica de los “Zidanes y Pavones”, ganando su segundo
Copa de Europa en Glasgow, donde quedó demostrado su potencial con un amplio
repertorio de paradas en los 20 minutos de partido que jugó tras la lesión de
César. También ganó su primera liga con el Madrid, y fue llevado al Mundial de
Corea donde fue titular indiscutible dejando una destacada actuación.
La Era Calderón,
llena de fraudes, se saldó con dos Ligas más para Iker, y un puesto de titular
indiscutible que le haría merecedor de un Trofeo Zamora y situarse como Segundo
Mejor Portero del Mundo por segundo año consecutivo. La vuelta de Florentino
fue un revulsivo para el Madrid, que a pesar de no ganar nada recuperó su mejor
versión tras la incertidumbre que dejó Calderón y su política.
A
partir de 2008 y hasta 2012, Iker fue nombrado Mejor Portero del Mundo cinco
años consecutivos, con actuaciones memorables como la famosa parada a Perotti
en el Pizjuán, o el muro que hizo en la Final de la Copa del Rey ante el
Barcelona en 2011, logrando así su primer título copero.
Su
actuación en el Mundial de Sudáfrica 2010, hizo que España levantara su primer
Mundial, y el guardameta se consolidó en la élite, cuajando un impresionante
torneo, y valiéndose el cariño de toda España, y el respeto del mundo entero. Aparte de este título, Iker levantó las dos Eurocopas de 2008 y 2012 con
España, haciendo un triplete histórico y dejando la tanda de penaltis contra
Italia en cuartos de final para la historia.
La Era
de Mourinho comenzó con muchas esperanzas, la famosa Liga de los Récords
logrando el máximo de puntos y de goles, acabó con su quinta y última Liga. En
2012, comenzó el desastre. Mou sentó a Iker tras dos meses y medio de lesión, y
la presión ejercida sobre el técnico portugués hizo que Iker perdiera su
confianza.
Ancelotti
en su primer año, le dejó a Iker la Copa y la Champions, títulos que el portero
madrileño levantó, conquistando la Décima Copa de Europa y su segunda Copa del
Rey. El entrenador italiano le dio la titularidad al año siguiente, pero el
madridismo ya estaba dividido.
Todo el
mundo recordará el pulso Buffon-Casillas por el cetro de Mejor Portero del
Mundo, el mismo mítico guardameta de la Juventus destacó su reacción en la
portería y la espectacularidad de sus intervenciones, su próximo entrenador,
Julen Lopetegui, definió su tren inferior como fuera de lo común, un guardameta
con velocidad, potencia, agilidad e intuición.
Un ejemplo
para los porteros de la cantera blanca, el niño que soñaba con defender la
portería del mejor equipo del Siglo XX, que acabó convirtiéndose en héroe del
madridismo y héroe de la selección española. Allá donde vaya, se le recordará
por su humildad, por esa concentración que transmitía en cada partido, el “Loco”
Gatti definió su talento como un don de Dios.
Siempre
recordaremos ese pie que le sacó a Berbatov en Glasgow, esa parada imposible a
Perotti en el Pizjuán, que repetiría dos años después ante del Moral, esa mano
a Iniesta en Mestalla en la final de la Copa, y más que paró el Santo del
Madrid, y más que parará en Oporto.
Finaliza
una etapa, comienza otra nueva, "Por encima de recordarme como un gran
portero o un mal portero, sólo espero que se me recuerde por ser una buena
persona", frase de Iker para el recuerdo, se va el Santo, se va el que
siempre nos quedaba cuando las cosas iban mal, se va una leyenda.
Por: @carlos2gogo
Por: @carlos2gogo